Descripción
Champú y gel de ducha de caléndula, Weleda
Limpieza extra suave para cabello y piel. Sin jabón.
Gel para baño y ducha sin jabón que limpia suavemente cabello y cuerpo.
Un básico entre los cuidados del bebé con ingredientes 100% naturales y 53% BIO. Gel para baño y ducha sin jabón que limpia suavemente cabello y cuerpo. Protege la piel de la sequedad y deja el cabello suave, sedoso y fácil de peinar. Con extractos de Caléndula Bio que calman la piel y no irritan los sensibles ojos de los bebés. Además, su pH neutro lo hace especialmente indicado para bebés y adultos con piel hipersensible, dermatitis atópica y costra láctea.
Beneficios
Protege la piel de la sequedad y deja el cabello suave, sedoso y fácil de peinar. Su fórmula sin jabón evita cualquier irritación en los ojos y mantiene la piel hidratada.
La alta tolerancia ha sido testada dermatológicamente, incluso en pieles sensibles. Sin conservantes, colorantes, perfumes sintéticos, ni sustancias de origen petroquímico. Apto para celiacos y veganos.
87% Buena tolerancia en la piel*
*Valoración de los padres después de 28 días
Sello Oficial: Natrue Sello propio: Vegan
Ingredientes
Ingrediente clave INCI Composición
Extracto de flores de caléndula
Caléndula Officinalis Flower Extract. La caléndula es conocida desde la antigüedad y es sin duda una de las plantas más eficaces y versátiles en el campo de la dermatología.
Las flores de Caléndula tienen un color anaranjado y son típicas de la planta de Caléndula. Gracias a su contenido en diferentes carotenoides, flavonoides y saponinas, tienen propiedades suavizantes y apoyan la regeneración de la piel.
Aceite de almendra dulce
Prunus Amygdalus Dulcis Oil
El fino y ligero Aceite de Almendra Dulce tiene alta tolerancia cutánea y es ideal para pieles sensibles, ásperas, secas y con escamas. Y por eso es muy adecuado para bebés y niños pequeños. Se caracteriza por un alto contenido en ácidos grasos insaturados, tales como el aceite y el ácido linoleico.
Una flor radiante, tierna y altamente eficaz para las heridas y la inflamación
Gracias a sus innumerables propiedades anti-inflamatorias y antisépticas, la Caléndula se ha convertido en la planta insignia de Weleda. La gama de Bebé Caléndula es sólo uno de muchos ejemplos donde “aprovechamos” sus propiedades. De hecho, muchos de nuestros cosméticos y medicamentos no se podrían elaborar sin los valiosos extractos de la caléndula. El cultivo de la planta se realiza principalmente en el huerto biodinámico más grande de Europa, ubicado en Schwäbisch Gmünd, en el sur de Alemania.
Cada verano, en el mes de junio, la caléndula abre sus ojos en este preciado huerto iluminando el paisaje con cientos de miles de radiantes flores de color naranja y cubriendo una superficie de una hectárea. Se recogen unas tres toneladas de flores y más de catorce toneladas de hojas y tallos, convirtiéndose en la base para la fabricación de tinturas y extractos de hierbas en casi 30 de nuestros productos medicinales y cosméticos naturales, aunque la mayor parte de la cosecha se utiliza para nuestra gama de bebé.
La Caléndula es una de las plantas más eficaces y versátiles en mantener la salud natural de nuestra piel. Su alto contenido en nutrientes como los carotenoides, flavonoides y saponinas triterpénicas es especialmente valioso para la curación de heridas. Los extractos de caléndula promueven la regeneración de la piel dañada y proporcionan un efecto antiinflamatorio para las infecciones de encías y resfriados.
Control de calidad en la propia recolección
El cultivo de nuestras plantas medicinales es biodinámico, y parte fundamental de la agricultura biodinámica es el pensamento cíclico.
Los residuos orgánicos son completamente reciclables y se utilizan para mantener la vitalidad de la vida del suelo. Naturalmente hace falta una gran cantidad de trabajo manual, ya que no se emplean fertilizantes ni pesticidas. Por ejemplo, la tierra debe ser removida periódicamente para que se mantenga suelta y la caléndula pueda absorber todos los nutrientes.
Las flores se recogen durante la mañana, justo después de la fase nocturna regeneradora ya que es en este momento en el que nos regala sus mejores propiedades. Y la recolección se hace a mano, con el fin de comprobar en el mismo momento la calidad de las mismas.
Además, se cuida el procesamiento. Nada más cosechar, los recolectores llevan las flores de inmediato a la planta de procesado, situada al lado de los campos. De esta manera se garantiza la máxima frescura.