Si quieres una casa y una vajilla bien limpias y relucientes no sólo hay que mirar qué jabones y detergentes usas; también vas a tener que fijarte en los utensilios que utilizas para fregar.
Los estropajos, esponjas y bayetas convencionales están hechos de plástico, lo cual los hace poco higiénicos (acumulan miles de bacterias en su composición sintética) y muy contaminantes (con cada fregado estás vertiendo microplásticos al agua y, cuando los desechas, se convierten en un residuo altamente tóxico que acaba contaminando gravemente).
¿La solución? Cambiar de utensilios para fregar y sumar sostenibilidad, belleza y practicidad a tu limpieza hogareña.
Estos cepillos, diseñados para fregar vajilla, sartenes y ollas, están hechos cien por cien de materiales naturales y biodegradables, no contaminan ni durante su vida útil, ni después. Y, además, convierten la tarea de fregar en un gesto sencillo para cuidar tu casa, tus manos y el planeta.
Con diferentes durezas para diferentes usos y necesidades. Perfectos, higiénicos, muy duraderos y versátiles.
Porque son los pequeños gestos los que más cambios positivos generan.
Y porque una casa con más madera y menos plástico es una casa más bella: una casa más eco-lógica.