Plato de bambú Eco Rascals

Descripción

Plato de bambú Eco Rascals

Este plato va a enamorarte. Está hecho con madera de bambú maciza, lo que le aporta robustez, muy difícil que se rompa, y una estética preciosa y biodegradable!.

Además, tiene una ventosa de silicona desmontable que permite que no se mueva del sitio. Las ventosas permiten que los bebés que están en fase de ‘volcar’ el plato tarden más en hacerlo (y tu puedas reaccionar a tiempo :P) y que no se les mueva el plato cuando intentan coger los alimentos de dentro.

Se divide en dos espacios super prácticos y visuales para poder ofrecer distintos tipos de alimentos en una misma comida. Estas grandes divisiones o espacios son perfectos para introducir nuevos alimentos y así permitir que los niños mejoren sus habilidades motoras finas al tener contacto directo con diferentes formas y texturas de alimentos.

Son platos con diseños que encantarán a los más pequeños…y a los más mayores.

Se trata de bambú orgánico (nada de residuos tóxicos!) y la base de silicona está aprobada por la FDA, libre de plásticos, BPA, PVC, plomo y ftalatos.

 

No te recomendamos que uses microondas, lavavajillas o congelador para mantener el plato en perfectas condiciones, si tomas esas precauciones tendrá una larga vida. Lavar con agua jabonosa tibia, enjuagar bien para no dejar restos de jabón y dejar secar 🙂

 

Medidas aproximadas:

21,6 x 18,6 x 3,3 cm

 

La base del plato que hace la succión es de silicona y se puede desmontar. Silicona 100% aprobada por la FDA, libre de plástico, BPA, PVC, plomo y ftalatos.

 

Lavar antes de usar por primera vez en agua jabonosa tibia y enjuagarlo bien.

No poner en microondas, hornos, esterilizadores, lavavajillas o congeladores.

La vajilla es importante limpiarla a mano con agua tibia, nunca en el lavavajillas. Si hubiera algún resto de alimentos, utilizaremos un cepillo o estropajo suave para quitarlo, pero no sumergimos la vajilla en agua.

Evitaremos el uso de jabón o detergente ya que puede absorberse y dejar restos en nuestro próximo uso estropeando el sabor de los alimentos. Si algún resto de comida se nos resiste, podemos añadir un poco de vinagre al agua tibia y utilizar la mezcla para limpiar la zona afectada. El vinagre no solo es un gran agente limpiador, sino que ayuda, también, a reducir los olores.

Antes de guardar la vajilla de bambú hasta su próximo uso, la secamos cuidadosamente con un trapo de algodón limpio y permitimos que se seque completamente al aire en un sitio alejado de la luz del sol. Entonces la podemos guardar en un armario o estante bien ventilado donde no se acumule la humedad. Así nos aseguremos que no se nos llena de hongos.